El , por fin, en una actividad realmente internacional. Y esto debe interesar a los aficionados de cualquier deporte.
, y Argentina est谩 a punto de ser admitida en el Tres Naciones, el torneo de Nueva Zelanda, Australia y Sud谩frica, grandes potencias del hemisferio sur.
Todo esto hubiera sonado rid铆culo o al menos fantasioso hace unos meses.
驴Qu茅 dice? 驴Que s贸lo le interesa la y los resultados de la quiniela? Vamos, hombre, haga un esfuerzo y abra la ventana al rugby, aunque m谩s no sea por unos d铆as.
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En los d铆as malos, de esos que todos tenemos (si hasta el gran tenor peruano dej贸 escapar un gallo el a帽o pasado), es dif铆cil refutar al c铆nico, para quien la importancia de un acontecimiento deportivo se mide por la cantidad de tramposos que participan.
Muchos p铆caros, gran importancia; pocos tramposos, ninguna importancia.
(Para el c铆nico, el d铆a en que el se quede sin tramposos, no llamar谩 la atenci贸n de nadie y caer谩 en el olvido. 驴T煤 est谩s de acuerdo?)
El fin de semana pasado, nada menos que fueron sancionados antes de la largada de las , la prestigiosa carrera que abre la temporada de la del automovilismo de Estados Unidos. Este es un n煤mero r茅cord de p铆caros para una sola carrera.
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Algunos jugadores del salieron de parranda el otro d铆a, en Portugal, y uno de ellos, borracho, atac贸 a otro con un palo de golf (seg煤n una versi贸n) o un bate de b茅isbol (seg煤n otra).
Los despertaron a media poblaci贸n, dejaron por el suelo el prestigio del club y revivieron un antiguo prejuicio: que los brit谩nicos beben para pelear y no para divertirse, como se supone que bebe gente de otros pa铆ses.
Aunque yo he escrito antes sobre esta notable diferencia, quiero dejar en claro que muchos comentaristas brit谩nicos hacen la misma distinci贸n.
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La pasi贸n, la paranoia y la imprudencia de pueden liquidar la fant谩stica aventura de este de , la m谩s cautivadora de los 煤ltimos a帽os en el 蹿煤迟产辞濒 internacional.
Todo vestuario es un polvor铆n. Los egos son barricas de p贸lvora y cualquier malentendido o divergencia puede servir de detonador.
Todos, jugadores, dirigentes y cuerpo t茅cnico, deben moverse en puntas de pie para evitar una calamidad. Una chispa y adi贸s. Es por eso que la primera regla, en todo vestuario, es 鈥渓os problemas los arreglamos adentro: a los de afuera, apenas el saludo鈥.
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El ministro brit谩nico de Finanzas, , acaba de apostar su camisa por la postulaci贸n de Inglaterra para organizar el Mundial de F煤tbol de 2018.
Sostiene que, con los Juegos Ol铆mpicos de 2012 y el Mundial de 2018, Gran Breta帽a puede convertirse, por la magia del ejemplo, la voluntad y el dinero, en una gran naci贸n deportiva. Hoy mismo, el ministro visit贸 el estadio de (que posiblemente est茅 terminado en el 2018, je, esto es un chiste) para lanzar en forma simb贸lica la campa帽a.
Tengamos en cuenta que Brown es escoc茅s, y que en circunstancias normales un escoc茅s jam谩s respaldar铆a el derecho de Inglaterra a acoger un Mundial, porque eso entra帽ar铆a el terrible riesgo de que lo ganase (y a los escoceses no les gusta que los ingleses ganen).
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Anoche, , con gol del conejo. El pato, respaldado por el rat贸n, no fue muy inquietado por caracortada y sus compa帽eros. Buen debut del pintita y bueno, podemos escribir una cr贸nica completa sin mencionar un s贸lo nombre. 脷nicamente apodos.
El 蹿煤迟产辞濒, como fen贸meno popular, comparte la extendida afici贸n por los apodos. Caramba, si hasta la FIFA lo reconoce. 驴Cu谩les son tus favoritos?
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En un mundo de tribus, que esto es el deporte, los adversarios no suelen ser amigos. Qu茅 va, acostumbran a ser enemigos mortales. Por eso da gusto hablar esta vez de dos amigos que al mismo tiempo son adversarios.
Lovie Smith es el entrenador de los Osos de Chicago, y Tony Dungy tiene la misma responsabilidad en los Colts (Potros) de Indian谩polis. Ambos se enfrentaron el domingo en el Super Bowl del 蹿煤迟产辞濒 americano, en el que .
Esta ha sido una de esas raras ocasiones en que el perdedor felicit贸 de todo coraz贸n al ganador. Pues as铆 debe ser, dir谩n ustedes; pero no lo es, digo yo.
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