Tirar la piedra y esconder la mano
En resumen, una cl谩usula especificaba que el servicio pod铆a vender las fotos de sus usuarios a otras empresas sin pagarles nada.
La respuesta no se hizo esperar. En redes sociales hubo protestas y se iniciaron movimientos para boicotear al servicio.
Horas m谩s tarde Instagram sali贸 a decir que los hab铆an "malinterpretado", que hab铆an escrito mal el borrador y que lo cambiar铆an nuevamente negando, adem谩s, que quisieran vender im谩genes de sus usuarios.
Pero 驴por qu茅 entonces quisieron cambiar las reglas?
Instagram, como otras empresas de la red (incluyendo a su matriz Facebook) est谩n tratando de ganar dinero. Vivimos en un mundo capitalista y 茅stas no son organizaciones de beneficencia por m谩s "cool" que parezcan.
Las compa帽铆as sociales de las red caminan, sin embargo, sobre una fr谩gil cuerda.
Por un lado tienen que ganar dinero -la mayor铆a lo intenta a trav茅s de publicidad- y por otro cuentan con un delicado activo: la informaci贸n, datos o im谩genes de sus usuarios.
Es como explotar una mina de oro rodeada de dinamita.
Aprendiendo de sus errores -sobre todo los de Facebook- han comenzado a tentar el agua antes de zambullirse.
Se est谩 haciendo costumbre que pongan a "prueba" nuevos t茅rminos y condiciones de servicio en forma p煤blica para recibir retroalimentaci贸n de los internautas.
Quiz谩 lo hagan porque son muy buenos o quiz谩 porque quieren saber hasta d贸nde pueden llegar sin provocar una revoluci贸n.
Bajo esta 贸ptica cualquier queja se convierte en un"error". "Fue una mala interpretaci贸n", "El lenguaje legal es complicado", "Queremos aclarar" y un largo etc茅tera se vuelven cada vez m谩s frecuentes.
Insisto, quiz谩 son equivocaciones de buena fe. El problema es que se equivocan mucho.
Y ah铆 hay un efecto m谩s da帽ino para estas redes sociales. Se trata de un problema de prestigio y reputaci贸n, un peque帽o c谩ncer que va minando la confianza que los usuarios tienen en estos servicios.
Y cuando la confianza -que es la raz贸n de existir de las redes sociales- se acaba, 茅stas desaparecen.
Facebook ha recibido m谩s de uno de esos golpes y el episodio de Instagram tambi茅n le hace mella.
Quiz谩 no todos recuerden que la red social de mil millones de usuarios es due帽a de Instagram, pero los formadores de opini贸n se han encargado de recordarlo a diestra y siniestra.
A fin de cuentas, dicen, Instagram no hab铆a experimentado una"revuelta" similar antes de unirse a Facebook.
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ComentariosA帽ada su comentario
Error nada, a eso le dicen "ponlo a ver si cuela"
Bajo esta 贸ptica cualquier queja se convierte en un"error". "Fue una mala interpretaci贸n", "El lenguaje legal es complicado", "Queremos aclarar" y un largo etc茅tera se vuelven cada vez m谩s frecuentes.
Sos un genio, David. Es tal cual lo dec铆s vos, de esta magn铆fica manera. Mejor, imposible.
La respuesta es desmpolvar el viejo Flickr que posee mejores prestaciones y soporte de imagen con una cuenta de yahoo y quedas como nuevo...!
Sin duda las redes sociales no son con animo de perdida, asi que creeria que es una forma de "tire y afloje" para medir hasta donde los usuarios estarian dispuestos a ceder parte de su informacion; de esta forma las redes podrian liberar parte de ese activo (congelado) que tienen alli pero muy "sensible" a perdida; Como diriamos por aqui "es mejor pedir perdon, que pedir permiso" ..es mejor para ellos pasar por "torpes" y pedir disculpas que mostrar una clara intension sobre el uso que se le quiere dar a la informacion de los usuarios.
En mi opini贸n Instagram queria sacar provecho de sus usuarios pero al ver la reacci贸n de los usuarios se dio cuenta de la direcicion equivocada que estaba tomando. un saludo.
Cuando lei el comentario de Instagram en que venderian mis fotos, sinceramente me senti amenazado y preferi cancelar mi cuenta de Instagram y santo remedio.