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El saludo que no se puede ignorar

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Matias Zibell | 2008-02-27, 14:20

Remero en el Nilo
Aunque el idioma más difundido en Pakistán es el urdu, el hecho de que sea el segundo país más poblado por musulmanes en el mundo hace que se cuelen en el hablar cotidiano varias palabras árabes.

En mi viaje como enviado especial para cubrir las elecciones parlamentarias me encontré en varias ciudades paquistaníes con el saludo que utilizo todos los días aquí en El Cairo, salam aleikum , o "que la paz esté contigo".

Y el encuentro no pudo haber sido más agradable ya que aunque en esta vida de errante he dicho "hola" y "adiós" en varios idiomas, nunca he hallado un saludo tan infalible como éste. Jamás nadie ha dejado de responder a mi deseo de paz.

He perdido la cuenta de las veces que he pronunciado "buenos días" ante amigos, conocidos y extraños y sólo he recibido como respuesta el eco de mi saludo perdiéndose en la indiferencia o el apuro de mi interlocutor.

Lo mismo me ha ocurrido con el "ciao", el "bonjour", el "good morning" "hi" "how are you", pero el salam aleikum parece obligar a su destinatario a responder inmediatamente aleikum salam con la fuerza de una orden, el hábito de un reflejo o la solemnidad de un protocolo no escrito.

No atribuyo esta infalibilidad a una cuestión de educación. En otras costumbres cotidianas, mis vecinos egipcios se saltan formas varias, reglas, normas cívicas y muestras básicas de respeto sin dudarlo ni un segundo, como lo hace cualquier hijo de vecino en Latinoamérica, Estados Unidos o Europa.

Me gusta pensar que en realidad, ni la persona más mal educada del universo puede ignorar la fuerza intrínseca de un saludo que en lugar de simplemente desear una buena jornada, va más allá y pide por la paz de otro ser humano.

Aquí no faltará quien me diga que estoy idealizando, que este lugar del mundo no se caracteriza justamente por ser un oasis de tranquilidad y que por el contrario, sobran guerras, muertes, luchas fratricidas, conflictos sectarios, atacantes suicidas y otros horrores dignos de mención.

No dudo de la veracidad de esta lista de tragedias, pero desde que pronuncié por primera vez salam aleikum en aquel abril de 2003 he sentido respeto y admiración por este saludo que sabe a juramento.

Hace casi 5 años todos los periodistas de la ý que habíamos llegado a Irak a cubrir la guerra o lo que quedaba de ella debíamos respetar ciertas medidas de seguridad. Viajábamos en convoys, nunca trabajábamos solos y avisábamos a otra persona de nuestros planes.

Después de una semana de cumplir este régimen en Kuwait y en el sur iraquí, un día salimos mi colega brasileño Paulo Cabral y yo solos por la ciudad de Basora a conversar con la gente y tomar fotografías de los destrozos causados por los bombardeos.

Nuestro primer destino fue un edificio del gobierno que estaba en ruinas. La gente decía que el gobierno de Saddam Hussein mantenía presos políticos en los sótanos de esa dependencia y que estos hombres habían sobrevivido a las bombas y esperaban ser rescatados.

Cuando llegamos el ánimo no era muy bueno. Cadenas de personas retiraban piedras de los escombros y miraban con desconfianza a los periodistas extranjeros que fisgoneaban en sus miserias. El humor no mejoró cuando saqué la cámara de mi bolsillo para tomar algunas fotografías.

Apelé entonces a las únicas dos palabras que conocía en árabe -salam aleikum- y las repetí como un mantra ante cada iraquí que me cruzaba por el camino. Nadie me detuvo, nadie me hizo preguntas, nadie se interpuso entre mi lente y mi objetivo. Todos respondieron como Ala manda y me dejaron trabajar tranquilo.

Por más que recuerdo aquella anécdota con cariño, no soy tan ingenuo de pensar que un saludo tiene el poder de evitar un conflicto y sacarnos de un aprieto.

Imagino que si a alguien por estas latitudes se le ocurre un día la estúpida idea de secuestrar al corresponsal de ý Mundo en Medio Oriente, no se detendrá en su empeño tan sólo porque yo lo reciba con un salam aleikum.

Pero me juego que mi secuestrador me dirá, aunque sea por costumbre, aleikum salam.

Después seguramente me dará en la cabeza con la culata de su AK 47 y me tapará la cara con una capucha negra, que como dicen en mi tierra, "lo cortés no quita lo valiente", y siempre hay tiempo para volver a hacer las paces.

ComentariosAñada su comentario

  • 1. A las 04:42 AM del 28 Feb 2008, San ó:

    Somos muy raros ¿no te parece? tan contradictorios en nuestras ideas, costumbres, hechos...
    y luego decimos cosas que quien sabe si sean verdad o de dientes para fuera, no es que quiera quitarte la ilusión de todo lo que contiene esa frase pero...
    somos contradictorios
    no pienses en las cosas malas que pueden pasar estando allá... que de solo saberlo una posibilidad asusta, mejor cuidate y esperemos que nunca sepamos si te hubiera respondido el saludo o no

  • 2. A las 11:53 AM del 28 Feb 2008, Alejandro Dow Aranda ó:

    Muy interesante el blog. Por mucho que leamos desde acá, en la comodidad de nuestros hogares, sobre la cultura musulmana, nunca podremos llegar a entender ciertas cosas que hay que vivir para conocer...por eso valoro tanto este Blog...éxito y salam aleikum.

  • 3. A las 06:51 PM del 28 Feb 2008, Dinia ó:

    Yo nací y vivo en una zona semi-rural del la capital de Costa Rica.

    Hace unos 15-20 años esta zona estaba llena de agrucultores, calles de piedrilla y gente caminando. Buses lejos y un carro perdido.

    Mis amigos saben eso. Y piensan que la zona sigue igual. Porque ellos viven en la ciudad, tan fría y violenta.

    Pero mi pueblo se está volviendo igual que la ciudad. Casi no hay cafetales, y los vecinos ni se conocen por los muros entre sus casas (miedo a los ladrones, con toda la razón).

    Pero una vez unas amigas vinieron a visitarme, y cuando venían caminando la gente con la que se encontraban las saludaba con un ¡Buenos días! (¡¡todavía hay esperanza!!).

    Se sorprendieron tanto!!!!! Y por supuesto, respondieron también al saludo. Ahí fue donde se convencieron que en el campo (rural) todavía hay gente que se preocupa por ser un poquito cortez, sin ninguna mal intención.

    Creo que eso puede pasar en todo lado, no solamente en "el campo".

    Y a todo esto, creo que ya hasta escribí un post para mi blog ;-)

    Gracias por la inspiración.

    Y cuidate mucho. Todos queremos tener siempre noticias tuyas todos los miércoles.

  • 4. A las 08:31 PM del 28 Feb 2008, Dinia ó:

    Yo nací y vivo en una zona semi-rural del la capital de Costa Rica.

    Hace unos 15-20 años esta zona estaba llena de agrucultores, calles de piedrilla y gente caminando. Buses lejos y un carro perdido.

    Mis amigos saben eso. Y piensan que la zona sigue igual. Porque ellos viven en la ciudad, tan fría y violenta.

    Pero mi pueblo se está volviendo igual que la ciudad. Casi no hay cafetales, y los vecinos ni se conocen por los muros entre sus casas (miedo a los ladrones, con toda la razón).

    Pero una vez unas amigas vinieron a visitarme, y cuando venían caminando la gente con la que se encontraban las saludaba con un ¡Buenos días! (¡¡todavía hay esperanza!!).

    Se sorprendieron tanto!!!!! Y por supuesto, respondieron también al saludo. Ahí fue donde se convencieron que en el campo (rural) todavía hay gente que se preocupa por ser un poquito cortez, sin ninguna mal intención.

    Creo que eso puede pasar en todo lado, no solamente en "el campo".

    Y a todo esto, creo que ya hasta escribí un post para mi blog ;-)

    Gracias por la inspiración.

    Y cuidate mucho. Todos queremos tener siempre noticias tuyas todos los miércoles.

  • 5. A las 09:21 PM del 28 Feb 2008, Gabriela García ó:

    Me encantó tu blog!!! Tal vez es la pasión de las creencias o que se yo. Pero lo que si sé es que de nada vale estar en este mundo hoy si no se espera que mañana será mejor, por mas idealista que suene y cursi que suene... creo que es así.
    Salu2 y cuídate mucho.

  • 6. A las 06:13 PM del 01 Mar 2008, Matilde Parra ó:

    Hola Matías:coincido contigo de que el saludo más refrescante y hermoso que un ser humano pueda recibir es QUE LA PAZ ESTÉ CONTIGO,relaja el espíritu,nutre el corazón,es como si un destello de amor y luz entrará en nosotros cuando lo escuchamos,ojalá este saludo se propagara por el mundo entero haria mucho bien,independientemente del credo religioso que se profese lo importante y valioso son las buenas intenciones del que las dice.Yo soy tu fan seguidora de tus Blogs.Saludos a tu esposa y deseo que tu hijo esté lindo y saludable.

  • 7. A las 10:50 PM del 02 Mar 2008, Anonymous ó:

    salam aleikum
    ya lo dijiste bien, es un saludo que sabe a juramento, quizas debamos aprender el significado de este saludo y adoptarlo como un simbolo de honor y de palabra, total en este mundo globalizado nos transculturizamos sin esfuerzo, y por que no de lo que realmente nos guarde un poco de esperanza ante la paz que nos hace falta.

    Abrazos Matías, he estado perdida al estar distraida de mi viaje a mi pais.
    Pero ya he vuelto!

  • 8. A las 06:40 PM del 17 Mar 2008, ana ó:

    Desearan tanta paz como pregonan.

  • 9. A las 03:32 PM del 30 Mar 2008, Daniel Salas ó:

    Y en el principio fué el verbo...Creamos el mundo en la fragua de nuestras intenciones, nadie puede ignorar nuestra naturaleza llena de bondad y de paz, todos buscamos permanentemente el reencuentro con esa fuente y ese saludo es una luz hacia el camino.

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