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 Algunas personas, con frecuencia grandes figuras de la vida p煤blica, pueden tratar de intimidar a los periodistas antes o despu茅s de dar una entrevista o declaraci贸n. A veces el marco es mucho m谩s complejo y los periodistas enfrentan situaciones que van mucho m谩s all谩 de un reportaje, como en el caso de las duras cr铆ticas del ex presidente serbio, Slobodan Milosevic, a los corresponsales de la 大象传媒 durante la guerra de los Balcanes. La 大象传媒 alienta a sus periodistas a responder con firmeza ante las intimidaciones, pues cuentan con el respaldo de la organizaci贸n. El juicio a Milosevic - Geraldine Coughlan, corresponsal de la 大象传媒 en La Haya A quien haya visto por televisi贸n los horrores de la guerra de los Balcanes le ser谩 dif铆cil olvidar las im谩genes de los refugiados que hu铆an de Kosovo, la matanza de Srebrenica o el bombardeo de Dubrovnik. Para un periodista que enfrenta la misi贸n de informar sobre conflictos b茅licos resulta mucho m谩s arduo distanciarse emocionalmente de esos recuerdos. Milosevic Slobodan Milosevic es el primer jefe de Estado llevado a juicio por la justicia internacional por genocidio y cr铆menes contra la humanidad. Un tribunal penal especial de la Organizaci贸n de las Naciones Unidas lo juzga por acusaciones de impulsar una campa帽a de limpieza 茅tnica con el fin de crear el estado de la Gran Serbia. El proceso a Milosevic, que comenz贸 en febrero de 2002 y podr铆a durar hasta 2004, es el juicio por cr铆menes de guerra m谩s importante desde la Segunda Guerra Mundial. Para muchos, lo que ocurre en el tribunal de La Haya se trata de una prueba determinante para la justicia internacional. Su singular naturaleza y su enorme escala son intimidantes para cualquier periodista que trate de ofrecer una cobertura justa e imparcial para una audiencia mundial, como la de la 大象传媒. El respaldo Aqu铆 en La Haya, en la sala del tribunal, presenciamos a diario los acalorados intercambios de palabras entre los testigos de la fiscal铆a y Milosevic, quien est谩 a cargo de su propia defensa. El ex gobernante adopt贸 un estilo beligerante durante sus interrogatorios, lo cual dificultaba a los periodistas la evaluaci贸n de sus argumentos. A medida que los jueces escuchaban los escalofriantes testimonios 鈥揷iviles quemados en vida, mujeres violadas, pueblos saqueados y ejecuciones sumarias a manos de las fuerzas serbias- Milosevic hac铆a todo lo posible por desacreditar a los testigos. Uno de ellos fue la periodista Jackie Rowland, de la 大象传媒, que cubri贸 la guerra en Bosnia y a quien el ex presidente acus贸 de mantener una posici贸n anti-serbia, al igual que el resto de los enviados de los medios internacionales. Cuando le toc贸 rendir testimonio ante Milosevic, Rowland defendi贸 en茅rgicamente la cobertura de la 大象传媒 durante la guerra de los Balcanes, apoy谩ndose en la reputaci贸n de imparcialidad de la organizaci贸n. Ciertamente, la situaci贸n dentro del tribunal era muy distinta que en el frente de batalla, pero el respaldo de la 大象传媒 tambi茅n se sinti贸 aqu铆. |
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